Un nuevo concepto de Joyería y relojería que hace la diferencia en Colombia

Era 1979 cuando Jorge Azuero y su esposa Sheyla Assaf decidieron abrir las puertas de su negocio familiar. En ese entonces, su sueño era ambicioso: crear un espacio donde los bumangueses pudieran acceder a las marcas de joyería y relojería más prestigiosas del mundo, sin tener que viajar al exterior. Se trataba de un pequeño local de 30 metros cuadrados en la carrera 33, donde, impulsados por su pasión y visión, dieron sus primeros pasos en este fascinante universo.

Juntos, desde el primer día, decidieron hacer las cosas de forma diferente. Mientras las joyerías tradicionales se enfocaban solo en la venta, ellos buscaban ofrecer una experiencia especial. 

Así, André Laurent se convirtió en la primera joyería de la ciudad a puerta cerrada y con aire acondicionado, algo que en ese momento era totalmente innovador.

Hoy, 45 años después de esa primera apuesta y de cambios que los llevaron a trasladarse en el año 2000 a un local dentro del Centro Comercial La Quinta, la compañía, que actualmente se encuentra en cabeza de los hijos de este matrimonio (Jorge Andrés, Daniela y Sheyla), le dio inicio a una nueva estrategia: que André Laurent estuviera a la altura de lo que ofrecía la industria joyera y relojera a nivel mundial.

En un espacio de 525 metros cuadrados, lleno de shop in shops, que recrean el universo de las más lujosas marcas del mundo, André Laurent demuestra que crecer puede llevar a grandes cosas.

Inspirados por una serie de viajes por diferentes países, decidieron invertir en un espacio de 525 metros cuadrados, donde las marcas tienen su propio “shop in shop”. También se enfocaron en darles vida a espacios en los que los clientes pueden disfrutar el universo que André Laurent ha creado para ellos. Esto con un objetivo puntual: cambiar la manera de vender y, de paso, transformar la idea que los consumidores tienen de las joyerías, no solo en la ciudad, sino en el país.

Su propósito es que los bumangueses vivencien una joyería y relojería de talla mundial y que no necesiten esperar a su próximo viaje a Nueva York, Miami o Londres, para acceder a las mejores marcas del planeta y, mucho menos, a la experiencia que ofrecen, hoy día, las boutiques de lujo del mundo.

¿Qué van a encontrar quienes visiten a partir de este momento André Laurent? De entrada, lo más notorio son los amplios espacios, algo que no es muy común cuando se trata de joyerías y relojerías, al menos en Colombia. Lo segundo, que las marcas tienen un universo propio dentro de la boutique, un lugar en el que las personas pueden conocer de primera mano cómo se ven estas a nivel internacional. Incluso, consiguieron hacer tiendas con acceso independiente dentro de la joyería para las marcas Hublot y Rolex, algo que no fue fácil de volver realidad, pero que pone a la ciudad en otro nivel.

Ahora bien, lo que realmente diferencia este nuevo concepto es la experiencia en sí, porque los visitantes ya no se van a encontrar  con  un asesor  detrás  de  un mostrador, alejado y

poco cercano, sino con confortables salas en las que se pueden sentar mientras disfrutan la naturaleza de cada marca y lo que la hace única, e incluso un área de biblioteca con la posibilidad de leer mientras reciben atención personalizada.

André Laurent también les ofrece espacios reservados para mayor confort y privacidad, y un bar con su propia carta de cocteles, bebidas y canapés, en el que habrá una persona siempre atenta a sus requerimientos. La intención es que los clientes se sientan cómodos y que pasen un rato agradable de la mano de la marca.

Esta joyería y relojería, en la que la experiencia es la base, es innovadora en la ciudad y el país, porque es la primera de este tipo en Colombia, además de la más grande. “Queremos convertirnos en un referente nacional que no tenga nada que envidiarles a las boutiques que se encuentran, por ejemplo, en el Miami Design District, en Miami, y creo que lo hemos conseguido”, aseguró Jorge Andrés Azuero, director comercial.

Este 2024, año en el que André Laurent celebra el aniversario número 45, marca un nuevo capítulo en la historia de la compañía, uno en el que la segunda generación ha prometido continuar innovando y creciendo. También pensando en grande, como lo hicieron Jorge y Sheyla desde el día uno, para seguir llevando la joyería a donde nadie más lo ha hecho.