Luisa de Liévano. El alma de la Navidad en el Centro Comercial Cañaveral

“Siempre he sentido una gran ilusión con la Navidad porque es la época más feliz del año donde se siente una magia en el ambiente y en los rostros de las personas”

Hace 25 años, el Centro Comercial Cañaveral resplandecía con una nueva cara tras culminar su primera remodelación, sin embargo, en medio de la emoción se presentó un desafío inesperado: la decoración navideña. Fue entonces cuando Luisa de Liévano, sin experiencia en el tema, pero con una determinación inquebrantable, asumió el reto de embellecer los espacios.

Aquella primera decoración se distinguió por su sencillez y elegancia. “No teníamos muchos elementos, pero contra todo pronóstico, nuestra propuesta cautivó a la comunidad, pero también ganamos un concurso que convocaba a los centros comerciales, organizado por la Cámara de Comercio, posicionándonos como un referente en Bucaramanga” recuerda Luisa

Así nació un sueño que año tras año ilumina los corazones de miles de visitantes. Pero la navidad en Cañaveral es más que una tradición; es el reflejo de un equipo de trabajo comprometido donde prima ante todo el talento local, ya que siempre han sido los artesanos santandereanos los encargados de crear la magia.

Como integrante de la Junta Directiva del Centro Comercial, Luisa de Liévano decidió liderar este proyecto, colaborando de todo corazón con total entrega y dedicando buena parte de su tiempo a planear y acompañar el proceso hasta que llega el momento anhelado de encender de las luces.

Luisa de Liévano junto a Martha Leyder Bautista, gerente del Centro Comercial Cañaveral
acompañados de los decoradores Edguer González y Kaoma López.

Luisa recuerda con cariño al fallecido decorador, Carlos Alvarado, quien durante más de 12 años fue su coequipero en esta tarea. “Carlos, concebía la ornamentación a través de su visión artística, mientras que yo aportaba ideas y algunas fotografías de lugares increíbles que visitaba en mis viajes. Entonces, él transformaba todas esas ideas en algo mejor de lo que imaginé”.

Carlos dejó un vacío difícil de llenar, pese a todo, el legado de su trabajo tuvo continuidad en las manos de Edguer González y Kaoma López, dos talentosos artistas locales encargados crear las figuras únicas que identifican la Navidad en Cañaveral. Una característica de este tipo de figuras es que son creadas totalmente a mano. Desde las magníficas estructuras de hierro hasta figuras de icopor y tela, cada elemento es elaborado sin recurrir a productos prefabricados ni importados.
Este año, los venados toman protagonismo representando la elegancia y la calidez que caracterizan las nuevas áreas remodeladas del centro comercial. Los tonos dorados y cálidos envuelven esta visión, buscando reflejar no solo la temporada, sino también un espíritu renovado y acogedor.

Para todas las personas la Navidad comienza en diciembre, en cambio, para los integrantes de este ambicioso proyecto empieza en el mes de mayo cuando se reúnen para generar ideas, analizar bocetos, revisar muestras de materiales y fotografías.

Aunque la inspiración en muchos lugares sigue las tendencias globales, el Centro Comercial Cañaveral continúa innovando y siendo fiel a su propio estilo. De este modo, con pasión y creatividad, la nueva temática comienza su desarrollo que puede tomar varios meses considerando que cada detalle de colores, materiales y motivos debe ser cuidadosamente elegido.

Cuando le preguntamos sobre los sentimientos que afloran al ver concluida su tarea, Luisa nos responde con una gran sonrisa: “la satisfacción más grande es ver personas de todas la edades disfrutando de las decoraciones. Cuando veo a los niños tomándose fotos o jugando, siento que todo el esfuerzo de nuestro equipo valió la pena”. Su ritmo de trabajo es admirable considerando que ya está pensando en lo que harán en 2025, año cuando entren en operación todas las áreas remodeladas del Centro Comercial Cañaveral.

“Cada vez que pienso en lo que vamos a idear para el próximo año, tengo la confianza en que siempre surgirá algo mejor, lo importante es hacerlo con el corazón”, concluye Luisa.

No cabe duda de que gracias a su compromiso y el de todo su equipo de trabajo, la Navidad en Cañaveral se ha convertido en un momento mágico para las familias.